En un principio, uno de los modelos nuevos sacrificados por la bancarrota de GM iba a ser el Cadillac CTS Coupe, pero se salvó al ser incluido en el plan de rescate presentado a la Casa Blanca. Sin embargo, varios comunicados ordenaban la muerte de los autos de altas prestaciones venideros, donde se iban principalmente el Camaro Z28 y el CTS-V Coupe. Pero hoy, tras la salida de Bob Lutz, nos alegramos al saber que el CTS-V está confirmado.
Seguramente no será un auto de muchos volúmenes, pero sí es un modelo fundamental para la nueva GM –y con ello la nueva Cadillac-, pues tras una atractiva y musculosa carrocería se esconde un brutal V8 capaz de retar (y superar) a rivales como el BMW M3, pero con sabor norteamericano.
Si bien el Cadillac CTS-V Coupe ya se confirmó, aún hay pocos datos sobre él. No sabemos cuándo llegará (presumiblemente en 2010, modelo 2011) ni cómo vendrá configurado. Pero si nos basamos en el CTS-V Sedan, que hasta hace poco fue el cuatro puertas más rápido de Nürburgring, inferimos que vendrá con el propulsor V8 de 6,2 litros, 556 HP y 551 lb-ft de torque, que le permitirían hacer el 0 a 60 mph en cerca de 3,8 a 4 segundos. El CTS-V Coupe rondaría por los 60 o 65 mil dólares.
